Susana Sánchez Segura
Las vacaciones de varano están por venir, es tiempo de maletas, carretera, playa, bosque, caminatas al aire libre y diversión en familia con nuestros perros y gatos compañeros ideales para estás aventuras.
Cuidar de tus mascotas también es cuidar a tu familia ya que las vacaciones para nosotros son descanso, pero para ellos puede significar riesgo si no tomamos las medidas preventivas para evitar contagios.
Resulta que el calor, la humedad y la convivencia con otros animales son factores que favorecen la proliferación de parásitos tanto internos como externos. Las pulgas, garrapatas, ácaros, gusanos intestinales y, sobre todo, el gusano del corazón (Dirofilaria immitis) son más activos en esta temporada y pueden comprometer seriamente la salud de nuestras mascotas. Lo que nos debe preocupar es que algunos de estos parásitos también pueden afectarnos.
Samantha Hay-Parker, MVZ y asesora técnica del segmento mascotas en Boehringer Ingelheim México, nos dice que, durante las vacaciones, las mascotas están más expuestas a parásitos. Muchos tutores no detectan los signos hasta que el daño ya es considerable. Por eso, la prevención es fundamental. Se trata de cuidarlos y cuidarnos.
Y es que los lugares más visitados durante el verano, como las playas, bosques o incluso guarderías caninas, suelen ser puntos de contagio si no se toman precauciones. Samantha explica que se debe poner especial atención en el gusano del corazón, que se transmite por la picadura de mosquito y que, de acuerdo con estudios recientes, abunda en las zonas turísticas costeras de México. Esta infección puede causar daños severos en el corazón y pulmones del animal.
Importante observar las señales de alerta, pues si bien los parásitos externos pueden notarse por el rascado constante, caída de pelo o la presencia de garrapatas o puntos negros (heces de pulgas), los parásitos internos suelen ser más silenciosos. Vómitos frecuentes, diarrea, debilidad, abdomen inflamado o tos persistente pueden ser indicios de que algo no va bien.
Los gatos, aunque más discretos en sus síntomas, también pueden ser portadores y transmisores de infecciones como la toxocariasis, que puede afectar especialmente a niños pequeños y personas con el sistema inmunológico debilitado.
La experta nos brinda 5 consejos para un verano libre de parásitos:
- Consulta al veterinario al menos dos veces al año.
- Limpia regularmente camas, juguetes y áreas comunes de tu mascota.
- Administra desparasitantes internos y externos con la frecuencia recomendada.
- Revisa su piel y pelaje tras cada paseo o viaje.
- Prevén el gusano del corazón con un tratamiento mensual, que debe iniciar al menos un mes antes del viaje y continuar al regresar.
La prevención es la clave para disfrutar de unas vacaciones tranquilas y sin sobresaltos. Proteger la salud de los animales es también proteger la salud de nuestras familias. Boehringer Ingelheim, comprometido con el bienestar animal y humano, desarrolla soluciones terapéuticas innovadoras y accesibles que ayudan a mantener a las mascotas saludables, activas y felices.
Porque cuidar es amar, este verano, planea con responsabilidad y cariño. Porque cuando cuidas de tu mascota, ella también cuida de ti. Unas vacaciones felices siempre deben estar libres de parásitos.
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