COLUMNA

Por Luigi El Fantasma

El legislador morenista, Gerardo Fernández Noroña, desde su inicio, como presidente de la Cámara Alta se dedicó a dar espectáculo de autoritarismo y caprichos, sin más el poder de ser el presidente de ese Congreso lo llevó a sus alturas que nunca creyó alcanzar, y con ese mareo provocó lo que será su más grande descalabro político y social, además de haber provocado pena ajena.

Todo, al grado de provocar que se agarrara de ring la Casona de Xicoténcatl, o lo que es lo mismo, el recinto del antiguo Senado de la República, donde hay una leyenda que les importó nada, que dice «la patria es primero».

Pero para estos sujetos, la patria es lo de menos, porque para ellos están primero sus intereses económicos y de hegemonía política.

Tan es así que no hay que olvidar como «Alito» fue descobijado en su momento por la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, otro personajazo, quien exhibió las propiedades del líder del tricolor, y que ha acosado hasta a periodistas.

Recientemente, Noroña fue desenmascarado por predicar la austeridad y practicar una vida lujosa, con vehículos que por lo menos valen millón y medio de pesos cada uno, así como tener una residencia en Tepotztlán, Morelos, con valor de 12 millones de pesos, cuando el fue uno de los dedos más álgidos para señalar excesos.

Al priísta que fue su contrincante de ese ring, Alito Moreno, se le ubica como político de derecha y a Noroña, como político de izquierda, pero lo cierto es que a la hora de la verdad, se dedican a lo mismo: a enriquecerse con un cargo público. Mientras tanto, la ciudadanía se queda en el limbo.

El descaro y la sed de poder no tiene límites

Hablando de chapulines y camaleones, el que se vio muy descarado fue el diputado local del distrito 16, Román Cortés Lugo, quién de la noche a la mañana, se dio cuenta de que su corazoncito era de izquierda, que lindo!.

El legislador, panista de toda su vida, vio la conveniencia que puede serle más rentable y fue a acompañar al diputado federal, Alfonso Ramírez Cuéllar, de morena, en su informe de actividades.

Pero es totalmente incongruente profesar siempre una ideología y luego buscar justificarse con cualquier argumento, para decir que se es simpatizante del progresismo, de las causas de los más pobres y de la transformación.

Lamentablemente, Román Cortés, es solo uno de tantos casos de políticos saltimbanquis, que se cambian de camiseta y de color, para poder seguir viviendo cómodamente del erario público.

Con la misma, otra panista, hasta el momento, que ha amagado con abandonar las siglas del PAN es la doña Ana María Balderas, ex alcaldesa y con diversos escaños como diputada de la bancada panista, se atrevió incluso a deshacerse de los colores albiazul, por el negro en sus locales de casa de atención, aparentando con ello ser neutral, pero como dice el dicho y por lo visto con su amigocho de partido, “cuando el rio suena es que agua lleva”.

Ya se verá si los consejeros de morena caen en el mismo error de la elección anterior, cuando ungieron como su abanderado a uno de los peores alcaldes de Atizapán, otro que fue panista de “corazón”, Gonzalo Alarcón.

Escenario complejo en materia social enfrentan en Tecámac

Hablando de Morena, un escenario complejo en materia social se está viendo en Tecámac, propiciando la desconfianza no solo de los militantes de Morena sino de la población en general y aun cuando los gobernantes hablan en sus discursos sobre los avances contra la pobreza, datos oficiales sobre la Situación de Pobreza y Rezago Social 2025 señalan que el 51.3% o sean 309 mil 673 habitantes de su población, sobreviven con carencias económicas y sociales que limitan su desarrollo.

Y todo es porque el gobierno no está en el Palacio Municipal sino en la casa de la senadora Mariela Gutiérrez.

Además, en este municipio el rezago ductivo persiste; mientras miles de jóvenes abandonan la escuela para integrarse al mercado laboral en condiciones precarias.

A este rezago hay que sumar la falta de acceso a servicios de salud y seguridad social, propiciando que la demarcación que “gobierna” Rosa Yolanda Wong Romero caiga en el descuido de inseguridad como se ha estado viendo.

Poder político bajo control de los Vargas – Contreras

Con más de 10 años en el gobierno de Huixquilucan, Enrique Vargas del Villar y Romina Contreras con el control de poder que tienen en la cúpula del PAN no solo del municipio sino del Estado de México, pretenden seguir con la presidencia ya que Enrique busca la candidatura para el 2027 luego de que sus aspiraciones para la gubernatura están cada día más en veremos.

En entredicho transformación de Tlalnepantla con Raciel

La situación política y de administración que se vive en Tlalnepantla se está descontrolando o que pasa, se preguntan los habitantes de esta localidad, se ha puesto en entredicho la transformación que tanto pregonan los morenistas y el mismo alcalde. Ya hasta los ciudadanos no afines a este partido le hacen caso omiso al alcalde Raciel Pérez Cruz, el cual presume encabezar un gobierno preocupado en servir a su pueblo con cero corrupción, solo que sus allegados o colaboradores lo han incrementado en forma por demás absurda.

Naucalpan requiere que su gobierno haga más por la gente y menos quimeras futuristas

No obstante que el alcalde morenista, Isaac Montoya, anuncia con bombo y platillo innumerables obras y acciones, sus proyectos terminan en planes que solo se quedan en espera.

Muestra de lo anterior es que aunque ya va a cumplir un año al frente del gobierno local, a toda pregunta que le hacen sobre soluciones que se requieren en esta ciudad, se limita a señalar que las cosas «se harán».