Un caballo murió en el Boulevard Allende, en Altamira, Tamaulipas y generó una nueva movilización de los cuerpos de rescate, pues, este incidente marca la tercera baja de un equino en las últimas tres semanas en la zona.
El informe inicial indicaba que el caballo podría haber sido víctima de una descarga eléctrica, debido a reportes de testigos que mencionaron la posible presencia de cables sueltos en el área.
Sin embargo, tras la llegada de los Bomberos Voluntarios y una inspección minuciosa del camellón central, no se hallaron evidencias de cables que pudieran haber causado una descarga.
Los rescatistas concluyeron que el equino había sufrido un infarto, que lo dejó sin vida en el lugar.
Hace tres semanas, una yegua en Ciudad Madero falleció por un infarto durante el parto, después de haber dado una patada a uno de sus propietarios.
Además, el lunes, otro caballo fue encontrado herido en la Laguna del Carpintero, abandonado por sus dueños a pesar del riesgo de ataque por parte de cocodrilos.
Por otro lado, en Altamira, la Dirección de Bienestar Animal intensificó los esfuerzos para controlar la presencia de caballos en la vía pública.
Desde el 1 de septiembre, la dependencia ha resguardado a caballos y vacas que se encontraban en la calle, aplicando sanciones a los propietarios y advirtiendo que los animales no reclamados serán subastados para cubrir los gastos de mantenimiento.
La directora de Protección Civil, María Luisa Cuevas Rivera, subrayó la responsabilidad de los dueños de mantener a sus animales en condiciones adecuadas y evitar que deambulen libremente en la vía pública.
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